lunes, 25 de febrero de 2013

'El sueño del otro', de Juan Jacinto Muñoz Rengel

Autor: Juan Jacinto Muñoz Rengel
Título: El sueño del otro
ISBN: 9788401353574
Editorial: Plaza & Janés
Año de edición: 2013
Páginas: 304

 






Xavier es un apocado y benevolente profesor de instituto divorciado con un hijo. André es un exitoso rostro televisivo, orgulloso y emprendedor. Ambos no podrían estar más en las antípodas el uno del otro. Pero sus vidas están más unidas de lo que jamás podrían imaginar.
Xavier Arteaga es un profesor de instituto que cada noche sueña ser André Bodoc, un director de informativos. André Bodoc es un director de informativos que cada noche sueña ser Xavier Arteaga, un profesor de instituto. Pero ¿quién sueña a quién? ¿Quién es real y quién está siendo soñado? 
                                                                                                      (Sinopsis facilitada por la Editorial)
 

Me siento delante del ordenador sin saber aún muy bien qué escribiré acerca de este libro. he de aclarar que lo leí en una semana en la que la fiebre y la gripe hicieron estragos en mi dolorido cuerpo. Mi mente tampoco estaba muy lúcida. Quizá por eso tenga sentimientos encontrados acerca de este libro. Por un lado, Muñoz Rengel consigue decir mucho en muy poco espacio, cosa harto difícil, y además logra que parezca que lo hace sin apenas esfuerzo, que es para quitarse el sombrero ante él. Esa forma tan sutil de crear ambientes me ha encantado. Y me atrae mucho la premisa de la que parte el libro y sus implicaciones a nivel social: ¿Qué es falso y qué verdadero? ¿Podemos manipular la realidad o vivimos en una realidad manipulada?. Sólo puedo ponerle un pero a esta novela: demasiada filosofía para mi gusto, demasiadas preguntas sin contestación y demasiado análisis para una lectura que pretende ser entretenida.

Xavier es un profesor de secundaria con una vida bastante gris. Desde que se divorció, y su hijo Lucas vive con su ex mujer, siente que ya no le queda nada más que perder. Quiere recuperarlos, enderezar una vida que no sabe en qué punto empezó a torcerse. Pero cuando comienza a soñar que es André Bodoc su vida irá encaminada a perseguir una respuesta a lo que le está pasando, a encontrar signos de cordura en su día a día. En esta persecución, por muy paradójico que suene, se encontrará a sí mismo.
André es un periodista que ha conocido el éxito y que está realizando una suerte de experiemento: lanzar noticias falsas para ver de qué manera se puede manipular la realidad. La aparición Xavier en sus sueños le desquiciará y se obsesionará con demostrar hasta qué punto la realidad que conocemos es una ilusión.


" Dime, Claire, ¿no te parece que alguien en algún lugar tiene que estar riéndose de nosotros?
Las promesas y los programas electorales no implican ningún tipo de comprosmiso legal.
Los políticos no dimiten. Los ineptos y los bufones copan las televisiones y son seguidos en masa. Los empresarios exconvictos cobran cantidades millonarias por conceder entrevistas.
Hay gente que se enamora de personas que nunca ha visto.
Hay perros que tienen sus propios armarios vestidores.
Hay quienes prefieren tener acceso a internet a tener una pareja.
(...)
No es posible. ¿Dónde está la cámara oculta? Esto no puede ser la realidad. "


La trama poco a poco se va complicando, quién sueña a quién, quién es real y quién no. Lo onírico y lo real se mezclan siendo difícil distinguirlos. Aparecen elementos de una vida en la que no corresponde, inquietantes coincidencias en ambos mundos, todo empieza a confundirse. ¿Qué significan los suicidios colectivos que tienen lugar en la vida de Xavier?. ¿Y la psicosis colectiva ante el "virus de la depresión" en el de André?. ¿Son estas anomalías síntoma de una sociedad que se desmorona o de una mente que se destruye?. Muchísimas preguntas se plantean en este brillante argumento que no siempre logra mantener el interés del lector. Y digo esto porque algunas disertaciones filosóficas o científicas sobre lo que entendemos por realidad se me han hecho algo pesadas (vuelvo a insistir en mi estado febril mientras leía el libro).

"Qué era real y qué no. Cuáles de aquellas imágenes eran más reales que las otras y por qué.
En aquel mundo todo era ilusión, pura apariencia. Lo tenía más claro que nunca:
la realidad, la auténtica realidad, siempre es invisible"

Muy interesante me ha parecido la evolución de los protagonistas, sobre todo de Xavier, que gracias a ser André encuentra la razón por la que luchar y sacar un carácter que desconocía que tenía. Esa combinación y complementación de los personajes, ese aprendizaje, esa dualidad con la que juega el autor durante toda la novela, te tiene en vilo hasta que se revela el final.


La crítica incisiva a la sociedad actual también es algo que me gustaría destacar. Muñoz Rengel a través de imágenes magistralmente creadas, casi apocalípticas, dibuja una metáfora del tipo de entramado que compone la sociedad actual: crisis de valores, despersonalización de las relaciones, intereses creados, tráfico de influencias ,corrupción, guerras, fanatismo. Unas imágenes que me han recordado un poco a las escenas que pintara El Bosco en su "Jardín de las Delicias" y que transportan a un mundo onírico, angustiante y amanazador.

El Jardín de las Delicias, de El Bosco (Museo del Prado, Madrid)


El asesino hipocondríaco me encantó, ya lo dije aquí. El sueño del otro me ha parecido digna sucesora del primero, brillante en algunos momentos, más ambiciosa y osada, más complicada y arriesgada. Pero en alguna ocasión ese sueño me ha arrancado algún bostezo, cosa que no me ocurrió con su antecesora. Aunque quizá sólo fuese la fiebre...


Gracias a Plaza & Janés por el envío del ejemplar.

miércoles, 13 de febrero de 2013

'El vino de la soledad' de Irène Némirovsky



Autor: Irène Némirovsky
Título: El vino de la soledad
ISBN: 978-84-9838-403-1
Editorial:
Salamandra
Año de edición: 2011
Páginas: 224

Hace menos de un año que empecé esta andadura como admisistradora de mi propio blog y llegado un momento como este es cuando te das cuenta de cuán positiva está siendo esta experiencia. Si no hubiese leído tantas veces el nombre de esta autora y reseñas tan positivas de sus libros a lo largo de estos meses, nunca me hubiese picado la curiosidad por leer una de sus obras y jamás hubiese tenido este libro en mis manos. ¡Y, madre mía, lo que  me hubiese perdido!. Y eso que se resistió, Correos me hizo pasar lo indecible pensando que lo habían perdido. Pero al fin llegó gracias a un intercambio que hice con Anna del blog El prestatge.
El vino de la soledad nos presenta a los Karol, una adinerada familia ucraniana de principios del siglo XX, compuesta por un matrimonio y su hija de ocho años. Tras el estallido de la Revolución Rusa, San Petersburgo y París, pasando por Finlandia, serán los escenarios que verán crecer a Elena, única hija nacida del matrimonio entre Boris y Bella. Elena es una niña inteligente, con un carácter algo introspectivo y soñador, que tiene una seria carencia de afecto maternal. Bella, su madre, es una mujer frívola y distante que desprecia a su hija y a su marido, un empresario judío obsesionado por el dinero y el juego. Elena encontrará el verdadero cariño en la figura de su niñera, una mujer francesa que le da lo más parecido al cariño que ella conoce y que le proporciona un espacio donde aislarse del mundo que le reodea. En este ambiente familiar la niña irá acumulando un odio enfermizo hacia su madre, a quien cree culpable de sus desgracias y, llegado el momento, verá presentarse la oportunidad de llevar a cabo su venganza.
"Gracias a mademoiselle Rose, la niña, que se había acostado con el telón de fondo
de un estrépito de gritos, discusiones y platos que estallaban en pedazos,
podía oír con indiferencia aquella lejana tempestad como quien oye el viento
en una casa caldeada con las ventanas cerradas, sabiendo que tenía
un refugio al lado de aquella tranquila joven que cosía junto a la lámpara"
Muchas cosas me han sorprendido de esta novela de Irène Némirovky, que  tiene mucho de autobiográfica. Una de ellas es la serenidad y la contención del tono narrativo con que Elena nos narra su vida, una vida marcada por un odio infinito hacia la figura materna que destila cada una de las páginas de este libro. Un sentimiento tan abrasador y cruel que sorprende la calma y el aplomo que demuestra esta joven cuando comparte con nosotros sus pensamientos más íntimos. Némirovsky hace que el lector sea capaz de sentir ese odio, que pueda palparlo en  ese ambiente emponzoñado que magistralmente recrea en esta novela. Una atmósfera opresiva en la que la niña va creciendo hasta alcanzar la mayoría de edad.
Sobresaliente también es la capacidad de la autora para hacer una radiografía exacta del desmoronamiento de una familia. Némirovsky hace un retrato descarnado de cada personaje, sin ocultar sus flaquezas, anhelos y miserias.  Bella Karol es un personaje complejo, una mujer guapa y carichosa que ve cómo la juventud la va abandonando y siente que no ha aprovechado la vida como debiera. Frustrada por esa sensación de que el tiempo se le escapa de las manos, culpa a su hija de la situación a la que se ha visto abocada y se comporta con ella con indiferencia y, en muchas ocasiones, con desdén y verdadera crueldad. Lo único que le hace sentirse viva y deseable son sus descarados y constantes flirteos con otros hombres y sus caros y excesivos vestidos de París.
Boris adora a su mujer y prefiere negarse a ver lo que para los demás es evidente refugiándose en el juego y entregándose de lleno a los negocios que suponen el sostén económico de la familia. Él es el único de sus progenitores por el que Elena siente verdadero afecto, a pesar de sufrir su trato condescendiente y sus contínuas ausencias que le hacen sentir como una "maleta olvidada en consigna".
Esta situación, añadida a otros factores que no desvelaré para no destripar demasiado la novela, es el perfecto caldo de cultivo donde Elena irá fraguando un profundo odio en su corazón. Su vida parece estar en stand by, los años pasan y ella está como a la espera de que llegue su momento. Su venganza se convertirá en el leitmotif de su vida. Dicen que la venganza es un plato que se sirve frío, desde luego esta novela es un ajuste de cuentas en toda regla que Némirovsky hace con su vida y, sobre todo con su madre. Unos usan el vino para olvidar o curar las penas, otros usan los libros...
"cuanto más se suavizaba su madre, con más fuerza sentía Elena
agitarse en su corazón un odio aún más vivo y feroz que cuando era niña.
Entonces habría bastado con tan poco... -pensaba-. Ahora es demasiado tarde.
Jamás la perdonaré. Podría perdonarla si me hiciera daño ahora, como soy hoy en día...
Sí, creo que la disculparía... Pero no se perdona una infancia destrozada."

jueves, 7 de febrero de 2013

'Las sirenas del invierno', de Barbara J. Zitwer


Autor: Barbara J. Zitwer 
Título: Las sirenas del invierno
ISBN: 978-84-08-10983-9
Editorial: Editorial Planeta
Año de edición: 2012
Páginas: 288
 
 
Dice la frase promocional de este libro que "si El club de los viernes te emocionó,  no puedes perderte Las sirenas del invierno". Yo no he leído el libro de Kate Jacobs pero sí me ha emocionado la amistad de estas sirenas octogenarias que han decidido vivir la vida, como diría Frank, "a su manera".

Joey Rubin es una joven arquitecta y decoradora neoyorquina. En los últimos años ha estado tan centrada en su trabajo y en conservar su independencia que ha ido descuidando viejas amistades por lo que ahora apenas cuenta con la compañía de su perra Tink. Una pasada relación sentimental con su jefe y el hecho de que no consiga pasar de ayudante de proyectos le pesan como una losa en el ámbito laboral. Pero un capricho del destino hace que consiga la oportunidad de dirigir ella sola la reforma de Stanway House, la casa señorial de la campiña inglesa donde J. M. Barrie escribió Peter Pan, y se vea de buenas a primeras en tierras inglesas. En Londres se reencontrará, después de diez años sin verse y sin apenas tener contacto, con Sarah, su amiga de toda la vida. Sarah lleva una vida totalmente opuesta a la de Joey, es una abnegada madre de familia numerosa que se ha adaptado perfectamente a su cómoda vida londinense. Retomar la amistad no va a ser cosa de un día, han pasado muchos años separadas y sus vidas poco tienen en común.

Stanway House - Cotswolds

Este principio se me hizo un poco cuesta arriba, no porque fuese aburrido, sino porque me parecía que no tenía nada de original. Pero como su lectura es tan fácil y amena, las páginas fueron pasando sin que me diera cuenta y, avanzando un poco más, comprendemos que esta introducción es totalmente necesaria para apreciar el choque que va a suponer para Joey llegar al pequeño pueblecito de Stanway. Acostumbrada a su estresante trabajo en la gran manzana, a la despersonalización de las relaciones y a la soledad de su apartamento sólo rota por las piruetas y ladridos de su perrita Tink, Joey descubre un lugar donde las relaciones son cercanas, todo el mundo se conoce, se saludan con cordialidad y la vida privada es casi de dominio público.
 
Tras un primer momento de desubicación, poco a poco la joven encontrará su lugar entre esta gente gracias sobre todo a las cinco octogenarias integrantes del Club Femenino de Natación J. M. Barrie. Aggie, Lilia, Meg, Gala y Viv no sólo son amigas desde siempre, sino que de jóvenes se hicieron la promesa de darse un baño todos los días, sea verano o invierno, en un lago cercano al pueblo. Joey tendrá la oportunidad de participar con ellas en esa especie de ritual y sentirse como una más en este grupo que será su principal punto de apoyo, entre otras cosas, cuando conozca al guardés de Stanway House, un atractivo viudo de trato difícil y padre de una hija en plena pubertad. El amor por supuesto llamará a la puerta de la protagonista pero la novela se centra sobre todo en torno a la amistad, a la importancia de saber conservarla y valorarla, a saber aprovechar las segundas oportunidades que da la vida y en procurar no desperdiciarla en cosas superfluas.

"Declaramos la intención de nuestro club, compuesto exclusivamente por mujeres,
de perseguir el objetivo de mantener la forma física mediante la práctica del ejercicio acuático,
la libertad de decir lo que pensamos y la búsqueda de la amistad eterna,
siguiendo los pasos de nuestro guía espiritual, James Matthew Barrie,
y ka más famosa de sus creaciones, el niño que no quiso crecer: Peter Pan."
 
Sin duda estas cinco mujeres han sido para mí lo mejor de la novela, cinco historias personales, cinco lecciones de vida de lo más diferentes que, sin embargo, han sabido conservar la amistad a lo largo de los años estando unidas no sólo en los buenos tiempos sino apoyándose aún más en los malos, algunos realmente dramáticos. Estas cinco "niñas grandes" hicieron lo más difícil que se nos puede plantear en una relación de amistad: aceptarse las unas a las otras tal como eran, con sus defectos y virtudes. Y prometieron, como hiciera Peter Pan, ser eternamente jóvenes porque la juventud muchas veces es un estado de ánimo.  Desde entonces siguen juntas disfrutando al máximo de la vida.

"Gala tenía la piel distendida y fina, la carne fofa le colgaba en el estómago y las caderas.
Tenía los brazos pecosos y fuertes , aunque se notaba que la carne estaba blanda bajo la piel.
Los pechos obviamente abundantes en otro tiempo, le colgaban también, pálidos, usados.
Pero a pesar de todo, la anciana caminaba con paso vivo y enérgico y parecía más segura y cómoda en su cuerpo que sus conocidas de la vida social neoyorquina del gimnasio,
siempre nerviosas y cohibidas."

La humanidad que desprende cada frase que pronuncian estas señoras ha hecho que me haya sido inevitable no sentir ternura por cada una de ellas y que me implicara de lleno en la trama. Son divertidas y ocurrentes pero también saben ver las cosas desde la perspectiva que les dan sus muchos años vividos. Ellas han aprendido lo que muchos todavía no comprenden: para hacer feliz a los demás hay que empezar por serlo uno mismo.

La sencilla pero emotiva historia que cuenta Las sirenas del invierno me ha dejado un muy buen sabor de boca. Recorrer la campiña inglesa de la mano de estas cinco entrañables ancianas ha sido todo un placer que además, me ha acercado un poco más a la figura de J. M. Barrie a través de pequeñas anécdotas que salpican la historia. El espíritu de Peter Pan inunda la novela y nos contagia, un logro que no todas las novelas consiguen.
 
 
 
 
 

martes, 5 de febrero de 2013

Hoy sale a la venta 'La princesa prometida' de William Goldman

Hoy se pone a la venta una nueva edición de 'La princesa prometida', la famosa novela escrita por William Golding y llevada al cine con gran éxito en 1987 por Rob Reiner.

El film es uno de mis favoritos desde que lo viera hace ya muchos años; conozco sus fotogramas al dedillo y me sé los diálogos, así que este libro que nos trae Martínez Roca no me lo pierdo por nada del mundo. Además es una edición especial que estoy deseando tener en mis manos.

Prometo traer reseña pronto...